Pera

Información de la Pera

Esta fruta es originaria de regiones de Europa oriental y de Asia occidental, donde su cultivo se viene realizando desde épocas muy remotas. Los griegos y los romanos conocieron el cultivo del peral y fueron estos últimos los que lo introdujeron en la Cuenca del Ebro. China y España son los principales países productores en la actualidad.

Dentro de las frutas, la pera se encuentra como una de las principales producciones a nivel europeo, tras la manzana y la naranja, con 3 millones de toneladas. Además, dentro de las producciones de frutas con pepita a nivel mundial, las peras predominan junto a las manzanas.

Efectos de la COVID-19

Para analizar los efecto de la COVID-19 tomaremos los datos que nos facilita el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), que nos permiten generar las gráficas para estudiar el Volumen Consumo Nacional Pera y la Penetración Nacional Pera en las que vemos la cantidad en miles de kilogramos vendidos en cada mes durante los años 2018, 2019 y 2020, así como la acogida de la pera en los hogares españoles, respectivamente. Por una parte, analizando el volumen de consumo nacional de la pera vemos que esta fruta, al igual que muchas otras, sufre variaciones dependiendo de la temporada en la que nos encontremos. Los años 2018 y 2019 presentan datos muy similares en cuanto a miles de kg vendidos de esta fruta. Si analizamos el año 2020 vemos que el comportamiento sigue siendo muy similar menos para el ecuador del periodo de excepción, el mes de abril, donde observamos un aumento algo significativo distanciándose hasta un 19% con respecto años anteriores. Es un aumento leve si tenemos en cuenta el gran volumen que la pera mantiene en estos meses. Posteriormente, en mayo vemos como se normaliza la situación y se vuelven a niveles típicos de años pasados.

En lo referente a la penetración nacional de la pera, 2020 se iniciaba con datos similares a los niveles obtenidos en los años 2018 y 2019. Con la llegada de la COVID-19 y la declaración del periodo de excepción, la penetración también sufre un ascenso de en torno el 5% en abril con respecto a los años 2018 y 2019. Con ello vemos como la producción de esta fruta se ve afectada positivamente ante la crisis sanitaria, pero con menor intensidad que otros productos hortofrutícolas.

Con lo correspondiente a las importaciones y exportaciones realizadas en España durante el periodo comprendido entre enero de 2017 y diciembre de 2020, observamos varios patrones. Tomando los datos proporcionados por Eurostat, con la información referente a las importaciones y exportaciones en el periodo mencionado donde España interviene como socio, analizando la cantidad de producto en valor monetario, observamos que las importaciones y las exportaciones siguen patrones ondulantes donde tienden a contrarrestarse con picos máximos de importaciones en el mes de marzo, y mínimos de exportaciones en dicha época del año. En cuanto a las exportaciones, estas presentan épocas por encima de las importaciones y otros periodos de tiempo donde repuntan muy por encima de estas últimas, concretamente en los meses de octubre y septiembre. Así, el mercado parece equilibrarse y mantener la oferta y demanda de este producto, como pasa con otros productos hortofrutícolas. Centrándonos en los niveles obtenidos durante el periodo de la pandemia, vemos que la tendencia en los meses del periodo de excepción con respecto las importaciones es alcista, como venía siendo lo normal, llegando a máximos locales que parecen mantenerse incluso en el mes de abril, hecho que no observamos en años anteriores, y que nos hace pensar que el inicio de la crisis sanitaria tiene cierto impacto positivo en términos de importaciones para esta fruta. Este impacto no es muy duradero por lo que tampoco es algo muy significativo, y es que en mayo los valores tienden a bajar siguiendo el patrón observado en otros años. Con respecto al mes de abril, observamos valores de exportaciones similares a los de años previos, disminuyendo progresivamente hasta alcanzar el mínimo valor del año en junio, como veíamos en todos los años anteriores. Así pues, podemos afirmar que el impacto de la crisis sanitaria sobre la pera es ínfima.